dima
  • Pasarela peatonal en Pamplona

    Identificación REDACCIÓN DEL PROYECTO CONSTRUCTIVO Y DIRECCIÓN DE OBRA PARA LA MEJORA DE LA ACCESIBILIDAD ENTRE EL CASCO ANTIGUO Y SEGUNDO ENSANCHE DE PAMPLONA POR MEDIO DE UNA PASARELA QUE UNA LA ZONA DEL FUERTE DE SAN BARTOLOMÉ Y EL BALUARTE DE LABRIT-PLAZA SANTA MARÍA LA REAL. CPV 71240000-2.
    Ubicación PAMPLONA
    Fecha de Proyecto 2009
    Fecha fin de obra
    Arquitecto/s MARISOL GARCÍA TORRENTE UBALDO GARCÍA TORRENTE EDUARDO MARTÍNEZ MOYA
    colaborador/es EDARTEC CONSULTORES SALVADOR LÓPEZ CERVANTES JACOB MARTÍNEZ ARIZA ESAÚ VÁZQUEZ RODRÍGUEZ JOSÉ LUÍS RAMOS CHÍA
    Aparejador
    Otros colaboradores
    Promotor AYUNTAMIENTO DE PAMPLONA
    Empresas
    Publicaciones
    Premios
    PROPUESTA ARQUITECTÓNICO-PAISAJÍSTICA: El proyecto presentado para la pasarela peatonal se basa en 2 puntos fundamentales: las exigencias de continuidad y eliminaciín de barreras arquitectónicas y la creación de un objeto sensible con el paisaje urbano en el que se insertaría. Como apunta el pliego de condiciones, “Dentro del sistema general de accesibilidad planteado por el Ayuntamiento de Pamplona, la bajada del Labrit sigue siendo un punto sin resolver en la zona este de la ciudad creando una gran ruptura de la trama urbana, con las disfuncionalidades que ello origina, entre el Casco Antiguo y Segundo Ensanche de la ciudad”. La pasarela peatonal propuesta permitiría de manera cómoda la transitabilidad por el Paseo de Ronda manteniendo la continuidad peatonal entre la zona del paseo del Obispo Barbazán y el baluarte del Labrit (Plaza de Sta María Real) con la zona del 2º ensanche de Pamplona (plaza de toros) y del parque de la Media Luna (ripa de Beloso). De esta manera, además, se posibilitaría la puesta en valor de aspectos del patrimonio aún inexplorados. En cuanto al diseño propuesto, se ha apostado por la sencillez del elemento, liberándolo de cualquier fórmula que implique un alarde formal-tecnológico o un exceso de materiales o detalles constructivos aparentes, para concretarlo en un trazo decidido y firme, cuyo alarde técnico queda supeditado a su presencia física en el espacio. De esta manera el objeto no entra en competencia con las muchas situaciones que se dan en este punto: infraestructuras interurbanas, concentración de edificios de diferentes épocas, elementos patrimoniales arraigados en la memoria colectiva, una masa verde que empasta todo logrando una sensación de continuidad. La pasarela así se convierte en un elemento ajeno a todos, al tiempo que es capaz de poner en carga cada uno de ellos, permitiendo testar estas diferentes situaciones desde posiciones inusuales, sobretodo los árboles cuyas copas pueden ahora tocarse. Estructuralmente la pasarela se divide en 2 elementos fundamentales: Viga y plataforma (losa en ménsula de sección variable). Ambos elementos serán de hormigón visto. La viga se realizaría con hormigón blanco, mientras que la losa sería de hormigón en su color natural más un revestimiento que le aportaría las mejoras de impermeabilización y cualidades de transitabilidad, al tiempo que matizaría el color de dicho elemento hasta dejarlo con el negro deseado. PROPUESTA TÉCNICA ESTRUCTURAL: La solución estructural se plantea como un puente que debe salvar una longitud de 78m, bajo el que discurre la Cuesta del Labrit. El diseño estructural parte de la construcción de una viga curva de gran canto, de 3,40m, resuelve el trazado de un punto a otro. Se propone una solución postesada que permita soportar los esfuerzos previstos. Así mismo, una losa de canto variable en voladizo desde la anterior, colabora estructuralmente con su forma de arco, y permite el tránsito peatonal sobre ella. El uso del postesado conduce a soluciones muy esbeltas, con relaciones canto/luz entre 1/30 y 1/45 dependiendo de las condiciones de contorno. Esto nos permite una pasarela sin apoyos, con un diseño muy limpio. Conlleva además una reducción del peso de la estructura y un mejor aprovechamiento de las armaduras de acero dispuestas. El trazado parabólico de los tendones produce unos esfuerzos contrarios al de las fuerzas gravitatorias, consiguiendo su compensación total o parcial. Como criterio de predimensionamiento del postesado se compensa las cargas permanentes en un porcentaje que oscila en torno al 80% dado que las sobrecargas son pequeñas en relación al peso propio. Las compresiones introducidas por el postesado sobre la sección tienen además un efecto muy favorable sobre la fisuración, lo que permite mantener intacta la rigidez y consecuentemente controlar las deformaciones. El conjunto se remata en sus extremos con sendos estribos de cimentación, con encepados de canto 150cm, apoyadas sobre grupos de 8 pilotes diámetro 850cm para aportar estabilidad al conjunto y transmitir al terreno los esfuerzos de flexo-compresión y torsión existentes. JUSTIFICACIÓN DE LA IDONEIDAD DE LA UBICACIÓN: Los lugares elegidos para los arranques de la pasarela son: La plataforma junto al edificio del Parque de Bomberos y más concretamente del muro de contención que lo separa del Fuerte de San Bartolomé, el cual quedaba predeterminado por las bases del concurso. La base del triángulo verde entre la bajada de la calle Juan de Labrit, La fortaleza de Labrit y el Frontón, sobre el muro de contención, junto a los vestuarios. El segundo punto tenía otras 2 posibilidades inmediatas: desembarcar a la cota +441,28, sobre la franja verde anexa a la Bajada del Labrit, lo cual implicaría una pendiente del 10,5 % del tablero transitable de la pasarela o bien desembarcar sobre la cubierta transitable de los vestuarios del Frontón, como se sugería desde las bases, pero ello implicaría grandes dificultades técnicas y sobretodo la afectación de una servidumbre de la una sobre el otro nada recomendable. La solución adoptada apuesta por la simplicidad técnica, el equilibrio formal y una gran comodidad en su recorrido con una pendiente del 2.4 %, lo que lo convierte en un agradable paseo que salva convenientemente la bajada del Labrit.