Identificación |
REHABILITACIÓN EDIFICIO S.XVIII |
Ubicación |
ALMIRANTE HOYOS 6-10. SEVILLA |
Fecha de Proyecto |
1995 |
Fecha fin de obra |
1998 |
Arquitecto/s |
MARISOL GARCÍA TORRENTE.
UBALDO GARCÍA TORRENTE
VALENTÍN MONTAÑO GONZÁLEZ |
colaborador/es |
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Aparejador |
Mariano Cordero Delgado
Miguel Portilla Castillo |
Otros colaboradores |
Fernando Alda. Fotógrafo |
Promotor |
COOPERATIVA DE VIVIENDA LA JUDERÍA |
Empresas |
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Publicaciones |
DIARIO DE SEVILLA. 1999. SECCIÓN DE ARQUITECTURA. 8 julio1999
DISEÑO INTERIOR 104. FEBRERO 2001
DISEÑO INTERIOR 105. MARZO 2001
MAGAZINE. EL MUNDO. 16 SEPTIEMBRE 2001
SEVILLA 1995-2005. Arquitectura de una década |
Premios |
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La solución adoptada ha tratado en todo caso de mantener la estructura organizadora y compositiva de los dos edificios que componían el proyecto, entendiendo la trama parcelaria como bien a conservar y proponiendo la agregación de parcelas como solución para el saneamiento de esta parte del casco sin perjuicio alguno de dicha trama ni de los elementos catalogados, matizando la definición del espacio urbano con una necesaria adecuación en cuanto a altura tanto de la fachada como de los patios, sometidos a una excesiva presión por parte de las fachadas y medianeras colindantes.
En la propuesta se conservan los elementos estructuradores fundamentales de la arquitectura doméstica tradicional del casco urbano, como son zaguanes, patios, galerías, etc. Se parte del quiebro en la entrada para que no sea directa y lineal para posteriormente en el interior descubrir una sucesión de espacios abiertos y cubiertos, de luces y sombras, buscando la pluralidad de espacios organizativos necesarios para un desarrollo rico en cuanto a orientaciones y privacidad de las viviendas de forma que el recorrido de dichos espacios suponga un paseo arquitectónico a través de esta casa-microcosmos.
Un potente núcleo de distribución se configura en la zona de conexión de los dos patios principales: el porticado existente y el mayor de los propuestos, donde se sitúan la escalera, el ascensor, y la escalera de acceso al sótano. La conexión de éste núcleo con el zaguán de la entrada por el nº 6, termina de consolidar este espacio como articulación entre las dos fincas, entre las dos arquitecturas. La apertura de un nuevo patio en la tercera crujía permite la iluminación y ventilación de una zona oscura siendo en total cinco los patios que organizan el proyecto. El remonte de una planta en la totalidad de la parcela proporcionará la posibilidad del diálogo entre la arquitectura antigua y la actual, y también la reconfiguración de las proporciones de los patios en relación con las medianeras colindantes y de la fachada con la calle.
En relación con la necesidad de reforzar la división parcelaria de forma que en todo momento se entienda la trama parcelaria preexistente, se plantea como alternativa al proyecto una mayor conservación del muro medianero reduciendo en lo posible la perforación del mismo, pero garantizando paralelamente la suficiente conexión entre las distintas partes de las viviendas, que siendo interiores, necesitan fachada a un patio vividero. Se reducen, pues las aperturas practicadas en dicho muro y además se construye en el remonte propuesto en planta segunda, de forma que tanto en su sección construida como en los espacios virtuales generados por el adintelamiento, se reconoce de forma evidente cada una de las parcelas.